Miércoles

Apreciado diario:

El argentino y yo decidimos por unanimidad clausurar el principal segunda bé por unos días e irnos de vacaciones.

Teniendo unos modestos y cada vez más escasos ahorros, y haciendo matemáticas de grado avanzado para poder hacer un presupuesto vacacional realista, al cabo de varias horas por fin encontramos un destino acorde con nuestras posibilidades…

(Música de suspense y redoble de tambores)

EL PISO DE MIS PADRES.

La elección del destino fue difícil, ya que Ibiza y Croacia están últimamente bastante de moda, pero nos decantamos por el piso de mis progenitores por las siguientes razones:

1- LA GASTRONOMÍA

2- EL CLIMA

3- LAS PRESTACIONES TECNOLOGICAS

4- LA FAUNA AUTÓCTONA

Y lo más importante: porque encajaba dentro de nuestros ocho euros de presupuesto familiar para comprar la tarjeta de TMB.

Este mediodía cuando disfrutábamos de todos los supuestos anteriores, y a punto de hincarle el diente a un pollo a la ciruela preparado por el doble de Sean Connery en versión miniatura (también llamado “papá”), algo ha cambiado en la tradición familiar.

Siendo una familia mayoritariamente de mujeres, desde pequeña mi padre no ofrecía resistencia en el mando de la televisión…

Pero estando ahora el rioplatense empatando el partido, y sumando que al ser de otro país lo tratan como “al invitado”, he tenido que ver muy en contra de mis principios y compromisos a los que la emtiví se refiere:

Llegando a la conclusión después de tragarme a hombres marcando paquete con lycras, chicas con mandíbulas prominentes que nadan, mujeres con kimono que parecían gorilas, y un largo etcétera de aburridas competiciones, que: las medallas españolas brillan por su ausencia y el chándal oficial por el amarillo fosforito.

Viendo la decepción dibujada en el rostro de mi progenitor por no ver ganar ni una medalla ni media, he decidido dedicar mi tiempo libre a buscar cosas en las que los españoles somos pioneros detallada en una la siguiente lista: