Apreciado diario,
Hace días que no veía una de esas pelis de suspense que te ponen los pelos como escarpias y que no te dejan ir a dormir a no ser que hayas hecho la mili en Melilla. Por ello, ayer, para que no me quedara en coma en el sofá, el Dulce de Leche decidió ponerme una de esas pelis que són el mejor remedio para el insomnio de una madre que no duerme del tirón since 1982
Y es que, ¿quién puede resistirse a una peli que tiene a Brad Pitt y asesinatos a mansalva?
Para las que no la hayan visto, aquí os hago un pequeño resumen:
Morgan Freeman es un abuelo cebolletas que está a punto de retirarse de la policía de Detroit, que prefiere hacer sudokus y quitarse los páluegos con un palillo, a perseguir asesinos. Y de repente le llaman porque hay un asesinato. Y Morgan se caga en tó lo que se menea porque sólo le quedan dos días y los tendrá que currar. Y allí se encuentra a Brad Pitt que es el típico que habla tocándose la bragueta. Y Morgan le hace bulling.
Y los detectives empiezan a investigar a un locatis que asesina según los siete pecados capitales, como los helados de magnum. El primero de ellos un hombre que lo único que ha hecho a la plancha en su vida son las camisas, que va menos al gimnasio que Paquirrín a la wikipedia y que tiene el corazón del tamaño de un bulldog inglés.
El de GULA.
Después, va a buscar a un abogado que está fofisano, que se ve que el asesino es muy de cuidarse la figura, y le obliga a cortarse los michelines. Y el abogado era de los que usan toallitas hipoalergénicas de aloe vera y dice que es el de la AVARICIA.
Después a un marichocho que huele a ambipur, que el asesino lo ató en la cama hasta que se pareciera a la Duquesa de Alba, y que de repente intenta hablar y les mete un susto que Morgan casi le cuesta la jubilación. Y era de los que se tiran en el sofá a tocarse el filipino y que prefieren comerse la lengua que levantarse a hacerse un huevo frito. Y este es el de la PEREZA.
Y Gwineth Palrtow, que es la mujer de Brad, tiene cara de primera comunión y llama a Morgan Freeman para invitarlo a cenar en su casa. Y se hacen amiguis. Y le dice que está pregnant y Morgan le dice que pobrecita que tener hijos es lo peor everenever. Y ella le dice que gracias, porque es muy educada.
Y el asesino les deja citas de un libro. Y piden el registro de las bibliotecas. Y encuentran a un marichocho que les dispara. Y Brad le persigue. Y él le mete atún pero no le mata.
Y hay otro asesinato, el de una señora de las que cobran por los besos, que la matan con un cinturón de bricomanía. Y el asesino dice que la mata porque estaba expandiendo la peste alta. Y es el de la LUJURIA.
Después vuelve a sonar el teléfono, que a los detectives no les da ni para hacerse un café en el bar de la esquina. Otra vez el asesino, que se ve que es muy de hacer horas extras, y le ha quitado la nariz, le ha sacado los implantes y le ha cortado las extensiones a una modelo de Victoria Sicret. Y ella se caga en lo que se menea y prefiere morir que parecerse a una loser de las que visten de primark y van a las tiendas de veinte duros. Y esa es la SOBERBIA.
Totally, que el asesino, que es Kevin Spacey se entrega porque los detectives van más perdidos que Belén Esteban en una librería, y les dice que se ha cansado de esperar y que le acompañen al sitio dónde están los otros dos cadáveres. Y ellos deciden ir, pero primero se afeitan los pectorales por si la cosa acaba en bukkake
Y el asesino les mete una chapa por el camino y les va haciendo de GPS. Y llegan a un descampado. Y viene el de MRW y le da un paquete a Morgan. Y Morgan lo abre porque estaba esperando algo de Inditex. Y el asesino le dice a Brad Pitt que quería cortarle las puntas a su mujer, porque envidiaba su pelo, pero que se le fue las manos y que le envía el cabolo. Y que sorry, colega. Y Morgan va corriendo, jugándosela con las arritmias, y le dice que no lo mate que es lo que él quiere, ser la IRA. Y hay un helicóptero que sólo hace de figurante con frases. Y Brad Pitt se toca la bragueta y le dispara hasta en las pestañas.
Y Morgan dice una moraleja.
Y THE END.
Una película que te enseña que con el carnet de la biblioteca y una ferretería cerca, cualquiera puede ser un asesino en serie.
Besis.