Apreciado diario:
Como ciudadana concienciada y comprometida con el deber, esta mañana he arrastrado a RuyRodrigo para personarnos en nuestra entidad financiera con un plan de actuación claro:
Un plan fácil en teoría, que en la práctica nos ha llevado todo el día resolver.
Como portavoz de nuestro multicultural hogar, y sabiendo que paso de la dulzura al rugido en cuestión de nanosegundos, mi dulce de leche me ha dado las últimas instrucciones antes de entrar en la sucursal de “La Caixa” de nuestro barrio:
-Shó seré el poli malo y vós el poli bueno
Una vez aclarados los pormenores de nuestro plan, hemos entrado en la sucursal a lo Thelma y Louis pero sin pañuelos, con paso erguido y desprendiendo seguridad por los poros de la piel.
POLI MALO -Queremos hablar con el Director, ahora mismo.
Cajero (RESOPLANDO)- Ahora le aviso.
De los cubículos transparentes, ha salido un hombre de unos cincuenta años bien vividos que apretando nuestras sendas manos nos ha invitado a pasar a un despacho con aire acondicionado.
CABECILLA DE LA SUCURSAL – Ustedes dirán.
POLI MALO rioplatense – Queremos sacar nuestros ahorros y “serrar” todas las cuentas.
POLI BUENO (osea yo) – Si no es mucha molestia, vaya.
C. DE LA SUCURSAL – ¿Y no quieren mejor una hipoteca para comprar una casa, un coche y una niñera? A ver, díganme ¿tienen ustedes nómina fija?
No ha sido hasta que nos encontrábamos de camino a nuestro hogar para buscar las tres últimas nóminas, que nos hemos dado cuenta de que habíamos caído en lo que viene siendo…
…(música de suspense)…
UNA MALDITA TRAMPA.
Invirtiendo los roles policiales con el porteño, y convirtiéndome por ello en el poli malo, volvimos a la sucursal con paso firme y decidido.
Ya se sabe que las mujeres en este tipo de situaciones tenemos mucha más mano izquierda, y es por eso que a los diez minutos de haber entrado en la sucursal, y hablando como la gente civilizada, hemos salido sin ahorros, pero con una vajilla de regalo y un seguro de vida.
Viendo que habíamos subestimado al enemigo y no quedándonos muchas otras alternativas con las que contra-atacar hemos utilizado el plan Cé… sisi…
QUIÉN RÍE EL ÚLTIMO RÍE MEJOR…
Y CON NUESTROS HUMILDES AHORROS… no se juega…
Atentamente: